Monterrey, Nuevo León, 21 de diciembre de 2010. Familiares de personas desaparecidas y organizaciones de la sociedad civil se presentaron frente al Palacio de Gobierno del estado de Nuevo León para demandar al gobernador Rodrigo Medina de la Cruz se realicen las investigaciones que los lleven a encontrar a sus familiares y a sancionar a los responsables.
Por la mañana de hoy en las escaleras del Palacio de Gobierno del estado de Nuevo León, familiares de personas desaparecidas, madres en su mayoría, realizaron un acto de protesta y, de manera simbólica hicieron entrega de los regalos que no pueden entregarle a sus hijos porque hasta el momento desconocen su paradero, al gobernador del estado, Rodrigo Medina de la Cruz, para que sea él quien los entregue durante la celebración de la Navidad.
Una de las madres presentes, de quien dos de sus hijos y su esposo continúan desaparecidos, explica que trajeron los regalos a este lugar porque ahora son “3 navidades sin llevar regalos a la casa, sin navidad ni fiesta.” Maria Inés Bernal, madre de 2, y tía del tercero, de los niños desaparecidos de CAIFAC, tiene dificultades para articular, el llanto y las palabras se le enredan en la garganta, Liz Sánchez, de Alternativas Pacíficas, interviene “el dolor que siente Inés, los sienten todos los familiares de los desaparecidos”, finalmente María Inés, puede decir “queremos que nos de respuesta (Rodrigo Medina, acerca de) como están los niños”.
A la pregunta por el paradero de los hijos, se suma la demanda de justicia.
“Queremos hacer una pregunta: ¿Qué podemos hacer los ciudadanos ante tanta injusticia e impunidad?” expresó Consuelo Morales, puesto que hasta el momento los familiares de desaparecidos no han encontrado respuesta por parte las autoridades, “resulta vergonzoso ver la pasividad con la que se conducen” agrega.
Consuelo Morales, directora de Cadhac, señaló además que el daño no es solo para los familiares sino para la sociedad en general. Respecto de las desapariciones involuntarias de personas “(estamos) concientes que esto va a seguir; no es el miedo lo que nos está paralizando, sino la impunidad”.
En un momento del acto, fue recordada Marisela Escobedo, activista por los Derechos Humanos, quien fuera asesinada frente a las oficinas del gobierno del estado de Chihuahua el pasado 16 de diciembre, mientras realizaba un plantón para demandar la aprehensión del asesino confeso de su hija, Rubí Marisol. La gravedad de su muerte, señalaron, es una señal terrible “para todos los que buscan justicia o defienden algún derecho”.
La frase pronunciada por uno de los oradores hizo eco en los asistentes, “¿Que tenemos que hacer? ¿Que será necesario? ¿Que nos maten? no queremos que suceda lo que sucedió en Juárez, exigimos respuesta.”
Finalmente, los organizadores hicieron un llamado a las personas que se encuentran en una situación similar, con un familiar desaparecido, para que se acerquen a los organismos de defensa de los Derechos Humanos, pues, según dijo Consuelo Morales, “aunque la ausencia se sienta, la fuerza de más ciudadanos los acompaña, pues no están solos.”