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Los niños deben ser protegidos

Boletín No. 0209/008 BP

19 de febrero de 2008

Los niños deben ser protegidos, no usados como una forma de reprimir a los manifestantes que bloquean calles en Monterrey

Ciudadanos en Apoyo a los Derechos Humanos A. C (CADHAC), organización no gubernamental y sin fines de lucro que desde 1993 se dedica a la defensa integral de los derechos humanos en el Estado de Nuevo León, manifiesta su más profunda preocupación por la separación de niños de sus madres y padres en el marco de los operativos contra manifestaciones en esta entidad.

En los últimos días la ciudad de Monterrey se ha visto afectada por una serie de bloqueos viales a manos de manifestantes que han protestado contra la utilización de efectivos militares en tareas que son propias sólo de las autoridades civiles. Varios manifestantes estaban acompañados de sus pequeños hijos, la prensa local ha informado que varios de esos niños han sido separados de sus familias con el pretexto de que los habían puesto en riesgo.

Es necesario recordar que el derecho a manifestarse está garantizado en nuestro país en la misma medida que lo está el derecho al libre tránsito. La autoridad tiene la obligación de mediar en la búsqueda de un equilibrio entre ambos derechos, nuestras autoridades no pueden dejar de lado sus obligaciones de protección de los derechos humanos alegando, correcta o incorrectamente, que los  manifestantes son manejados por grupos delictivos o que consideran que su petición es errónea o ilegítima.

Ante esta situación resulta por demás preocupante que las autoridades del Estado de Nuevo León hayan decidido separar a los niños de sus familias. La autoridad argumenta que los niños fueron puestos en riesgo, pero ese riesgo no existiría si la dispersión de los bloqueos se llevara a cabo de forma pacífica, preferiblemente mediante una negociación. El Gobierno del Estado no puede alegar que los niños están en riesgo porque las fuerzas públicas pueden llegar a golpearlos al reprimir a los manifestantes, si eso llegara a suceder no se trataría del delito de violencia familiar, como se ha manejado, sino de abuso de autoridad.

Esta organización condena que las autoridades estatales arrebaten a los niños como una forma de represión social en contra de los manifestantes. La separación de los niños de su núcleo familiar debe ser siempre una medida extrema, llevada a cabo con apego a derecho, después de una amplia reflexión y cuando sea la única alternativa para garantizar sus derechos humanos. Si los manifestantes actúan de forma violenta o si la negociación se torna imposible, la autoridad tiene todas las herramientas legales y materiales para reabrir la circulación vial sin lastimar a nadie, sin separar familias y sin causar más daño a la sociedad.

Exigimos que se cumpla con el compromiso internacional suscrito en la Convención de los Derechos del Niño de la Organización de las Naciones Unidas y por lo tanto, para cualquier acción o decisión, el bienestar superior de los niños, esté por encima de cualquier otro interés.

“Protestar es un derecho, reprimir es un delito”

CIUDADANOS EN APOYO A LOS DERECHOS HUMANOS, A.C

Los niños deben ser protegidos