8 de diciembre de 2018
Boletín 1812/30
El sábado 8 de diciembre de 2018, alrededor de 100 personas se congregaron frente al kiosko de la Plaza Zaragoza en Monterrey para exigir verdad y justicia por las víctimas de desaparición forzada en Nuevo León durante la Vigilia por nuestras personas desaparecidas convocada por la Agrupación de Mujeres Organizadas por los Ejecutados, Secuestrados y Desaparecidos de Nuevo León (AMORES) y Ciudadanos en Apoyo a los Derechos Humanos A.C. (CADHAC)
En este evento, celebrado en el marco del 70 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos a celebrarse el 10 de diciembre, se realizó una ceremonia religiosa para los familiares de víctimas de desaparición en Nuevo León celebrada por el padre Luis Eduardo Villareal, director de la Casa del Migrante Casanicolás y aliado en la lucha por verdad y justicia en los casos de desaparición.
Virginia Buenrostro, madre de David Joab Ibarra Buenrostro y Jocelyn Mabel Ibarra Buenrostro, desaparecidos desde noviembre del 2010, habló en nombre de las familias de AMORES haciendo un llamado para continuar con la búsqueda de las personas desaparecidas e impulsando que más personas se sumen a la exigencia por verdad y justicia para todas las víctimas de desaparición forzada.
“Es particularmente resaltable que las familias que han sido víctimas de violaciones a los derechos humanos reivindican justamente esos derechos justamente porque no quieren que ninguna otra persona enfrente el suplicio y la barbarie que ustedes tienen y que portan con tanta dignidad”, reconoció Alan García, representante de la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de Naciones Unidas.
Tomaron también la palabra Sonia Torres, integrante de CADHAC, Maricruz Flores, integrante del Colectivo Plural de Mujeres, y Elizabeth Warfield, directora de la Misión de USAID en México, quienes destacaron que las familias no están solas en su búsqueda y que el acompañamiento será constante hasta encontrarles.
“El amor que ustedes tiene por sus hijos está presente y es lo que nos está impulsando a buscar nuevos caminos. Ese amor es lo que nos da fuerza.”, reconoció la Hna. Consuelo Morales, directora de CADHAC.
Durante el evento se proyectó un video en el que rindió homenaje a las personas que han sido localizadas a través de prueba de ADN, a las personas que han sido víctimas de ejecución extrajudicial, a las personas que murieron en la búsqueda por verdad y justicia para sus familiares y a las personas que permanecen desaparecidas.
En el Kiosko de la Plaza Zaragoza se desplegaron mantas con leyendas y fotografías que recordaban a las personas que seguimos buscando con la constante pregunta “¿Dónde están?”. Al pie del Kisko se formó un corazón con veladoras que una a una fueron colocando los familiares de personas desaparecidas tras haber dicho sus nombres y su fecha de desaparición.